Secuestro del compañero Felipe Vallese
El 23 de agosto de 1962 el nuestro Movimiento entonces en la clandestinidad ofrecía a la Patria el primer desaparecido del Peronismo. Se trata de Felipe Vallese, trabajador de la metalúrgica TEA en el Barrio porteño de Flores, elegido por sus Compañeros como Delegado y como tal un incansable y comprometido defensor de los derechos de los trabajadores, lo que lo convirtió en “molesto” para la patronal y también para algunos sectores sindicales más propensos al arreglo con los patrones que con las aspiraciones y necesidades de quienes decían representar. Miembro de la Juventud Peronista (JP), militaba además fuera de sus responsabilidades gremiales siendo uno de los cuadros jóvenes más destacados en aquella época de la Resistencia Peronista.
En la noche del 23 de Agosto de 1962 luego de varios días recabando información, fuerzas policiales que buscaban a miembros de la Resistencia Peronista, entre ellos a Alberto Rearte, hermano de Gustavo, uno de los fundadores de la JP, emboscan a Vallese, lo golpean entre varios al resistirse a golpes de puño y lo trasladan a la Comisaria de San Martín y luego a la de Villa Linch donde es salvajemente torturado, lo que le provoca su muerte. Debido a ello deciden desaparecer su cuerpo.
Investigaciones periodísticas -pese a las negativas policiales y de sectores judiciales- partiendo de testimonios de vecinos del lugar del secuestro y de presos sociales que lo vieron en comisarías, logran reconstruir lo sucedido publicándolo en el periódico “El Compañero” bajo el título de “El infierno de Felipe Vallese”. Por esto, en 1971, 9 años después, 39 policías implicados fueron juzgados y condenados por secuestro (no por asesinato porque el cuerpo no apareció) a la pena mínima de 3 años. El mayor responsable, Oficial de policía Juan Fiorillo integró la “Triple A” asesinando a los periodistas de la investigación en 1974 y a partir del golpe cívico militar de 1976 ocupó cargos de jerarquía en la policía bonaerense, siendo acusado por varios delitos de lesa humanidad. En 2006 es detenido y fallece antes de recibir condena, dos años después en prisión domiciliaria por una enfermedad terminal.
La calle Canalejas donde Vallese fue secuestrado pasó a llamarse Felipe Vallese, al igual que el salón principal de la CGT. Seguirá vivo en el corazón del Pueblo Peronista. Al contrario de sus asesinos, su recuerdo y ejemplo permanecerán por siempre. ¡¡¡PRESENTE!!!
Afiche divulgado por la CGT con ilustración de Ricardo Carpani. 1963